lunes, 14 de enero de 2013

Una Casa

¿En qué momento una casa deja de ser una casa?, ¿cuando se cae el techo?, ¿cuando le sacan las ventanas?, ¿cuando las paredes se desmoronan?, ¿cuando se convierte en un montón de escombros?

Pero un día, de repente, las paredes de la casa se desmoronan. Sin embargo, si la puerta sigue en pie, todo lo que hay que hacer es abrirla y volver a entrar. Es agradable dormir bajo la luz de las estrellas, y la lluvia no importa; total, no durará mucho.

Paul Auster, La invención de la soledad